A las 2:50 de la mañana de esta pasada madrugada no se oía a casi nadie en el auditorio de ESAC (el centro de la Agencia Espacial Europea en Madrid) a pesar que la sala estaba completamente llena. Sólo algunas risas tensas, nerviosas, rompían el silencio del auditorio. Todas las miradas estaban puestas en una pantalla prácticamente en negro, intentando adivinar la torre de lanzamiento grabada por alguna camara de poca calidad en plena noche en un lugar al norte de Moscú: Plesetsk.

Foto: ESA
Muchas esperanzas, muchos años de trabajo, de esfuerzo e ilusiones estaban puestos en la cima de un cohete con miles de litros de combustible. Y de repente, sin previo aviso, sin cuenta atrás, la pantalla se iluminó con una explosión que llenó por completo la imagen. Preocupación por parte de todos los asistentes, hasta que por fin pudimos vislumbrar como el cohete se elevaba rumbo al espacio.
Luego llegaron los datos de telemetría del cohete, que nos aseguraba que este seguía su rumbo establecido. Todo el mundo atento a que el puntito que representaba el cohete en la pantalla no se desviara de la linea que marcaba su trayectoria. Y para satisfacción de todo el mundo no lo hizo, no se desvió. Hacia las 3:15 de la madrugada el satélite dejó de comunicarse con el centro de control. Algo normal, puesto que se encontraba al otro lado del planeta, y las antenas no podian ya seguirle. Aprovechamos para hacer una pausa, para respirar un momento. La comunicación no se restablecería hasta las 4:13. Y por entonces ya debería de ser el mismo SMOS quien dijera sus primeras palabras confirmando que el lanzamiento había sido un éxito, que sus paneles solares se habían desplegado correctamente, que lo habíamos logrado.
Y así fue. No sin momentos de tensión, de nervios, de miles de intentos por leer en la cara del jefe de control algún signo de alegría o de decepción, algun indicio que pudiera adelantarnos la información que tanto estabamos esperando. Y esa fue que SMOS ( y posteriormente Proba-2) llegaron en buen estado a su destino. El satélite ya está orbitando en el espacio. Nos felicitamos por ello.
Me alegro de que todo haya salido bien.
Muchas gracias.
Muchísimas felicidades!